La policía venezolana ha asaltado la casa de Beatriz Adriana Guzmán Barrios y ha detenido a su esposo. La familia Barrios ha recibido nuevas amenazas a pesar de que debería estar gozando de protección, según ordenó una sentencia de la Corte Interamericana. Diez miembros de la familia han sido asesinados desde 1998 en circunstancias que sugieren que la policía ha estado implicada con casi total impunidad.
Beatriz Adriana Guzmán Barrios ha denunciado que siete individuos vestidos de civil y con placas identificativas de la policía irrumpieron en su casa sin orden judicial de registro el 17 de septiembre, hacia las diez y media de la noche. Su esposo, Dany Rafael Bolívar Montevideo, fue puesto bajo custodia policial sin orden judicial de detención. Fue puesto en libertad al cabo de unas horas, pero los policías le dijeron que “la próxima vez lo [pasará] bien mal”. Según la familia, unos minutos antes los mismos policías habían visitado la casa de la madre de Beatriz Adriana, Eloisa Barrios, y habían exigido que los dejaran entrar.
Ella les negó la entrada porque no le mostraron orden judicial de registro. Eloisa ha encabezado los esfuerzos de la familia para reclamar justicia por los delitos cometidos contra su familia.
Diez miembros de la familia Barrios, del estado venezolano de Aragua, han sido asesinados desde 1998, al parecer por agentes de policía. Otros miembros de la familia han sufrido diversas formas de intimidación, hostigamiento, amenazas y ataques de la policía. Los miembros que han sobrevivido corren peligro de sufrir represalias por sus intentos de obtener justicia por estos delitos.
La familia Barrios cree que las amenazas y la intimidación son debidas a sus constantes demandas de justicia, medidas de protección efectiva y reparación por las graves violaciones de derechos humanos que han sufrido.