Maduradas
Robert Serra, padre del diputado del PSUV asesinado el miércoles por la noche en el interior de su casa, aún no asimila la muerte de su hijo. Se enteró de la noticia varias horas después, por la llamada de un hermano. Trabaja como supervisor de ventas y la noche del crimen el hombre durmió en Charallave, pues realizaba unos recorridos por la zona. “A las 6:30 pm del miércoles le pasé un pin a Robert para informarle que no iba a dormir en la casa. Sé que leyó el mensaje, pero no me respondió”. Desde temprano y hasta las 2:00 pm estuvo encargado de recibir en la casa a los funcionarios del Cicpc, Fiscalía y Sebin que adelantan las investigaciones.
Cuando los funcionarios se retiraron, el hombre se tomó un tiempo para hablar de su hijo. “Todavía no he asimilado la muerte de mi hijo. Era excelente hijo y persona. Él no tenía frenos en su trabajo y yo sabía que iba a seguir evolucionando. Desde pequeño Robert siempre decía que algún día iba a llegar a ser presidente. (Ovario II dice: De lo que nos salvamos). A él lo que más le indignaba era la pobreza, por eso era fanático de ayudar a los pobres. Cada Día del Niño preparaba una actividad para ellos y les regalaba juguetes”. (Ovario II dice: Si les regalaba armas de fuego… él era muy bueno con los niños…) A continuación véan las fotos de los niños de de las comunidades del 23 de enero cargando armas de fuegos más grandes que ellos. Todo eso fue obra de esa joya de Robert Serra que era tan bueno…











