Por Ángel Vivas – Noviembre 15, 2014

El general retirado venezolano que se atrincheró en su casa en febrero sigue resistiendo en su fortaleza más de ocho meses después. «Si me entregara sin duda sería asesinado», asegura.
Hace más de ocho meses que el general retirado Ángel Vivas hizo frente fusil en mano a las fuerzas de Nicolás Maduro que tenían orden de detenerlo acusado de incitar a la violencia. Aquel 23 de febrero este veterano del Ejército venezolano convirtió su residencia de la urbanización de Prados del Este en Caracas en su fortaleza «de honor, de dignidad y de patriotismo». Allí sigue resistiendo a esta «infame dictadura» por amor a su patria y «por decencia» porque «es inmoral no hacerlo», dice.
Ni en la peor de sus pesadillas imaginó que fuera a verse «sitiado» en su casa «por agentes del estado terrorista y narcotraficante cubano propiedad de los sanguinarios ancianos Castro con el apoyo de fuerzas militares venezolanas». Tampoco pensó que este asedio fuera a prolongarse tanto tiempo, pero no se plantea entregarse -«sin duda sería asesinado»-, ni claudicar «hasta que Cuba sea expulsada de Venezuela y los traidores que le sirven sean castigados». Muy activo en las redes sociales, ahora se siente más acompañado en su lucha, apoyado moralmente por muchísimas personas en todo el mundo. Está convencido del triunfo que le espera a la resistencia venezolana. «Creo que el futuro de esa cosa que llaman en forma aberrante «revolución bolivariana» es el lado oscuro de la historia y el de los responsables de ella es la cárcel», señala Ángel Vivas en esta conversación con ABC.
-¿Cómo está llevando este tiempo atrincherado? ¿Se ha convertido su casa en su propia cárcel? read more









