Por Diego Arria
El dirigente político Diego Arria consideró que es “lógico y responsable” que el candidato Henrique Capriles Radonski tenga seleccionada a la nueva cúpula militar. Así lo dijo a propósito de las declaraciones del ministro Henry Rangel Silva, quien acusó al aspirante presidencial de querer desarticular a la Fuerza Armada.
“Henrique Capriles Radonski afirmó que tiene decidido qué general activo ocupará el Ministerio de la Defensa. El anuncio es más que pertinente y refleja su respeto por la institución armada que Hugo Chávez y Henry Rangel Silva pretenden apropiarse para fines distintos a su responsabilidad constitucional”, señaló Arria.
El pasado 8 de noviembre de 2010, el mismo Rangel Silva aseguró al diario Últimas Noticias “que La Fuerza Armada Nacional no tiene lealtades a medias sino completas hacia un pueblo, un proyecto de vida y un Comandante en Jefe. Nos casamos con este proyecto de país”. En esa oportunidad, agregó que “un hipotético gobierno de la oposición a partir de 2012 sería vender el país, eso no lo va a aceptar la FAN y el pueblo menos. Y un intento por desmantelar al sector castrense, habría una reacción tanto de los uniformados como del pueblo, que sentiría que le quitan algo”.
Arria recordó que a propósito de esas declaraciones, le escribió al oficial una carta pública.
En opinión de Arria, Rangel Silva se equivoca al indicar que la “agresión a la FAN está en la agenda de la oposición”. “Lo que si estaría en la agenda de la justicia es procesar a todos aquellos que como él traicionan su compromiso militar y constitucional”, aseveró.
Agregó que “las irresponsables declaraciones de este general constituyen una amenaza a la mayoría del país casada con la libertad, la democracia y la constitución y que está decidida a imponerse y se impondrá sobre las desviaciones que él y el propio jefe del Estado pretenden. Sin dudas también reflejan su temor ante la inminente victoria de la unidad democrática nacional que encabeza Henrique Capriles Radonski”.
En esta oportunidad, instó a Rangel Silva a que “en lugar de jugar el deprimente papel de servidor de Hugo Chávez, atienda sus deberes constitucionales y a las investigaciones que cursan en su contra por vinculaciones con grupos asociados al narco tráfico internacional”