El Carabobeño
El izamiento de la bandera cubana en el Fuerte Paramacay, en Naguanagua, es “una humillación y de vergüenza”, así como una acción inconstitucional, indicaron el secretario de la UC, Pablo Aure, y el General de la Guardia Nacional, Humberto Seijas.
Izar una bandera extranjera en una institución militar significa que hay presencia de funcionarios de ese país en esa instancia. Esto es lo que ocurre en el Fuerte Paramacay, asiento de la 41 brigada Blindada, donde hasta este jueves se veía ondeando una bandera de la aliada nación junto a la venezolana.
Todos los analistas coinciden en que esto comprueba y confirma las denuncias que en 2010 presentara el general (r), Antonio Rivero, al señalar que hay oficiales cubanos en los cuarteles “más allá de lo permitido”, pues según Rocío San Miguel, directora de la ONG Control Ciudadano para la Seguridad, quien asomó que en la simbología castrense “esto dice públicamente que hay cubanos que se ocultan en cuarteles venezolanos”.
La gravedad de esto se realza al conocer que un fuerte de esta naturaleza prohíbe, en muchas ocasiones, la entrada a civiles venezolanos al ser considerado una zona de seguridad, “incluso se restringe la presencia de extranjeros, lo cual es bochornoso y constituye una provocación”.
Pablo Aure:
Desde el lunes de esta semana, la bandera de Cuba es izada en el fuerte Paramacay de Naguanagua, donde tiene asiento la 41 Brigada Blindada.
En efecto, a las 6 de la mañana comienza la ceremonia. En primer lugar izan la cubana y luego la de nuestro país.
Enarbolar la bandera de un país extranjero en instalaciones militares no puede tener una interpretación distinta a la de la sumisión militar a los designios de ese país. Pudiéramos decir que los jefes militares venezolanos están a la merced de Cuba y luego de Venezuela.
¿Qué es esto? Cierto: no es nada nuevo, desde hace algún tiempo se viene afirmando que los cubanos dan órdenes en nuestros cuarteles; y si alguien tenía dudas solo basta pasearse por Naguanagua y dar un vistazo hacia las instalaciones del Fuerte Paramacay y verán como ondea la bandera de Cuba al lado nuestro pabellón nacional.
Valdría preguntarnos: ¿será un acto de provocación hacia los militares institucionalistas; una humillación hacia la tropa venezolana o un acto de traición a la patria?
¿Será que los integrantes de la Fuerza Armada Venezolana han olvidado que milicianos cubanos han asesinado a muchos militares venezolanos en cumplimiento de su deber de resguardar la soberanía? ¿No recuerdan eñ desembarco cubano en Machurucuto?
Hoy vemos como los jefes militares de Venezuela, que juraron defender nuestra patria, se burlan de los familiares y compañeros de armas que han muerto defendiendo nuestra patria de las agresiones de la guerrilla cubana de otros tiempos, sino que mancillan el nombre de la isntitución en con este acto de entrega de nuestra soberanía enarbolando la bandera de Cuba en una de las principales fortalezas militares del país. ¡Hasta cuándo!
La Constitución de la República de Venezuela, en su artículo 13, establece que “No se podrán establecer en él bases militares extranjeras o instalaciones que tengan de alguna manera propósitos militares, por parte de ninguna potencia o coalición de potencias”.