El Tiempo
Enrique José Caruto Pérez, de 22 años, recibió una puñalada en el intercostal izquierdo en el penal de Barcelona. Su madre dice que le pidieron Bs 13.500
Barcelona.– “Asesinaron a mi hijo por no tener 13 mil 500 bolívares que le exigía uno de los pranes de Puente Ayala para resguardar su vida”.
Fueron las palabras de la ayudante de cocina Lilieta Pérez, quien dijo no haber podido llevar el dinero que le pidieron a Enrique José Caruto Pérez, de 22 años.
El muchacho ingresó el lunes en la emergencia del hospital Luis Razetti, tras recibir una puñalada en el intercostal izquierdo. Dejó de existir este jueves a las 12:40 pm.
Caruto purgaba una condena de 12 años por el delito de robo agravado. Llevaba cuatro meses recluido en el recinto penitenciario capitalino.
Lilieta Pérez cuenta que semanalmente le llevaba dinero al segundo de sus nueve hijos para pagar “la vacuna”. Esta vez no pudo reunir el dinero.
“Ya me había pedido anteriormente mil 600 bolívares para cancelar lo que llaman la causa”, dijo.
Indicó que a ella le ocultaron que Enrique José agonizaba desde el lunes en el hospital capitalino. Fue ayer cuando a través de una llamada telefónica, un compañero de celda le informó lo ocurrido.
¿Inocente?
La mujer explicó que a su hijo lo detuvieron hace dos años por el robo a un vendedor de perros calientes en la población de Boca de Uchire, en la zona oeste de Anzoátegui.
“El delito lo cometió otro individuo que pagó a los policías para que lo liberaran y mi muchacho fue arrestado para tapar la falta de los funcionarios”, aseguró.
Mientras, Kelvin Javier Gil (20) fue herido de una puñalada en el intercostal derecho el pasado domingo en la cárcel capitalina. Se presume que tampoco pagó a los pranes.